Este ejercicio o práctica esotérica, al igual que cualquier otro, conviene realizarlo en las primeras horas de la mañana; precisamente en los momentos en que el sol nace y después de haberse aseado perfectamente, limpiado las fosas nasales y lavada la boca.Si las condiciones no lo permiten, el horario puede ser cambiado, atendiendo las posibilidades del aspirante.

Todo limpio relajado, se procede de la siguiente manera:

1.- Buscaréis un lugar o ambiente adecuado en el que haya la menor o ninguna perturbación posible.

2.- Profundizaréis el estado de relax, en posición cómoda, en un sillón o silla, echado decúbito dorsal, o sentado en alguna "asana" o posición yoga. Recomendamos la Swástica asana, conocida como Shukha asana, o la mundialmente conocida asana de loto.

3.- Orad... Orad con todo vuestro corazón y con toda concentración penetrando en el corazón, pedid a vuestro Padre quién mora en secreto y a vuestra Bendita y Divina Madre para que sean Ellos quienes transformen en "ojas", o energía crística, la simiente divina que se halla depositada en las gónadas y pedid que ELLOS, vuestros Divinos e íntimos Padres espirituales, conduzcan a través de los canales o nadis de Idá y Pingalá hasta el corazón el "ens séminis" transformado totalmente en energía. Las oraciones serán siempre terminadas en nombre del adorable, de Jesús el Cristo, por el Cristo, por el Cristo.

4.- Toda la atención consciente se concentra en los órganos sexuales y, haciendo un magnífico ejercicio de voluntad e imaginación conscientes, se visualizará el fuego vivo y palpitante, el mismo que flama intensamente.

5.- Se inhala prana hasta llenar plena y suavemente los pulmones para luego, en ejercicio consciente de la voluntad e imaginación, llevar el fuego sexual hasta la región del Kanda, hasta la base de la columna vertebral, siempre por los canales de Idá y Pingalá.

6.- Se retiene prana por unos segundos y, luego, vocalizando suavemente el mantram "S", se exhala el aire; al mismo tiempo, siempre en ejercicio de la voluntad e imaginación consciente, se hace ascender el fuego sagrado a lo largo de los canales de Idá y Pingalá hasta el cerebro y hasta el corazón.

El mantram "S" se vocaliza con los dos labios apenas entre abiertos y alargando el sonido como un suave silbo, así: SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

7.- Se repite la inhalación, la breve retención y se procede a una nueva y suave exhalación vocalizando el mantram "S", siempre manteniendo la voluntad e imaginación firmes y constantes en el proceso de transmutación.

El tiempo de práctica, inicialmente, será de diez minutos, para luego de nueve días, aumentar tres minutos y así sucesivamente hasta completar la hora.