El tema que ustedes conocen y ya más o menos tienen referencia, que les causa inclusive pavor, miedo, terror, es el anticristo.

Cuando alguien escucha hablar del anticristo, propiamente empieza a temblar, o por lo menos tiene un ligero y leve sacudimiento en su interior que le pone alerta, Anticristo.

¿Quién es el anticristo, o qué es eso que se denomina anticristo?; las diferentes religiones, llamémoslas así solamente por no rebajarnos de nivel, dicen que el anticristo es un ser muy maligno, terriblemente perverso y que va a venir en una y otra forma a desviar, inclusive a los escogidos del Sendero que conduce a Dios; lo más chistoso de estas expresiones es el hecho de que quienes pregonan semejante juicio, son precisamente los exponentes del anticristo.

En el mundo existe diversidad de religiones, que no son más que religionzuelas, no son nada más que instrumentos de negocio, o son realmente agencias del abismo; esas religionzuelas o agencias del abismo, o instrumentos de negocio, son realmente tentáculos del anticristo.

El anticristo no es simple y llanamente un sujeto, no es un individuo, no es una persona. Analicemos lo que es el Cristo, ¿qué es el Cristo?, Él es sustancia, sustancia cósmica; sustancia cósmica que vive y palpita en nuestro sistema sexual; ¿y qué es el anticristo?, lo contrario al Cristo, pero sin embargo el anticristo también es sustancia, sustancia que no es cósmica, es sustancia planetaria emergente de las expulsiones que sufre el individuo de su simiente; todo acto de fornicación genera el anticristo, todo acto de castidad muy bien entendida engendra el Cristo.